La Unión Europea ha negado haber bloqueado envíos de 3,1 millones de dosis de la vacuna COVID-19 de AstraZeneca para que no vayan a Australia.
El primer ministro Scott Morrison ha culpado a los problemas de suministro de vacunas por los retrasos del plan de vacunación en Australia.
Dijo que se suponía que cuatro millones de australianos serían vacunados a fines de marzo, pero que solo unos 855,000 habían recibido la vacuna el lunes.
El objetivo no se alcanzó debido a problemas de suministro que resultaron en que tres millones de dosis no salieran de Europa hacia Australia, dijo Morrison.
"Puro y simple", dijo a los periodistas.
Puntos destacados:
- El primer ministro Morrison culpó a los problemas de suministro de vacunas por los retrasos del plan de vacunación.
- Europa niega haber bloqueado el envío a Australia de 3,1 millones de dosis de AstraZeneca.
- Morrison anuncia que en las próximas semanas estarán disponibles más dosis de AstraZeneca fabricadas localmente.
El vicelíder de los nacionales, David Littleproud, dijo que Australia había quedado "muy decepcionada" con la UE.
"La aritmética es simple. Nos faltan tres millones debido a la UE, que nos cortó", dijo.
Pero un portavoz de la Comisión Europea dijo que la única solicitud de exportación rechazada de casi 500 recibidas ha sido hasta ahora un envío de 250,000 dosis a Australia en marzo, lo cual es bien conocido.
"No podemos confirmar ninguna nueva decisión de bloquear las exportaciones de vacunas a Australia o a cualquier otro país", dijo el portavoz en una conferencia de prensa en Europa el martes.
Morrison dijo anteriormente que cualquier retraso en las importaciones de vacunas no afectaría el plan de Australia y respalda la estrategia de implementación de su gobierno.
Dijo que en las próximas semanas estarán disponibles más dosis de AstraZeneca fabricadas localmente, y señaló los requisitos de prueba necesarios para cada lote.
"No tengo la intención de apresurar el proceso y poner en riesgo la salud de las personas", dijo.
El primer ministro rechazó las demandas del Partido Laborista de organizar sitios de vacunación masiva, diciendo que las clínicas generales son actualmente la mejor opción para las primeras etapas del plan que se centra en las personas vulnerables.
Tampoco quiere incorporar farmacias al plan de vacunación antes de lo planeado.
El portavoz de salud Laborista, Mark Butler, dijo que se necesita una nueva estrategia.
Quiere que los farmacéuticos se incorporen antes al plan de vacunación después de conocer que su incorporación se había retrasado un mes y que no comenzarían a administrar inyecciones hasta junio.
