La inmensa riqueza de la Iglesia Católica en Australia, que se calcula en unos 30.000 millones de dólares australianos palidece las indemnizaciones que da a las víctimas de los sacerdotes y religiosos pederastas.
Los pagos que da a los sobrevivientes de abusos sexuales a menores es de unos 49.000 dólares bajo el sistema de indemnizaciones llamado Towards healing establecido por la Iglesia Católica australiana en 1996.
"Estas cifras confirman lo que sabíamos, que hay una gran desigualdad entre la riqueza de la Iglesia Católica y su respuesta a los supervivientes", dijo la directora ejecutiva de la Fundación "In good faith", Helen Last.
La ejecutiva recordó que de las 600 personas registradas en su fundación por haber sido víctimas de los religiosos pederastas "una indemnización mínima y una falta de cuidados integrales en relación a los abusos de la Iglesia".
Una investigación de seis meses de los diarios Sydney Morning Herald y The Age descubrieron que la riqueza de la Iglesia es mucho mayor a la que declaró ante la Comisión Real que investigó la respuesta de las instituciones a los abusos sexuales a menores bajo su cuidado.
La Iglesia entonces declaró un precio menor a sus propiedades en los estados de Nueva Gales del Sur y Victoria argumentando que un aumento de las indemnizaciones a los menores abusados por miembros de su institución requeriría el recorte de sus programas sociales, recordaron los diarios del grupo Fairfax.
Los periodistas del diario The Age, con sede en la ciudad de Melbourne, descubrieron que solamente en el estado de Victoria, al sur del país, esta institución posee bienes valorados en el año 2016 en unos 7.000 millones de dólares.
Los periodistas del diario The Age, que obtuvieron información sobre las tasaciones de las propiedades en diversos municipios de Victoria.
A partir de esa cifra y la información disponible de las propiedades de la Iglesia en el resto del país calcularon que tiene una riqueza que asciende entre 25.700 y 29.600 millones de dólares.
La Iglesia Católica posee unas 1.800 propiedades entre iglesias, presbiterios, escuelas, casa de ancianos, hospitales, oficinas, canchas de tenis y torres para telefonía celular, además de seguros, fondos de inversiones, entre otras.
La comisión reveló el año pasado que la Iglesia católica, con fuerte presencia en Australia, recibió quejas de 4.500 personas por presuntos abusos a menores cometidos por unos 1.880 miembros de esta institución, sobre todo por parte de sacerdotes entre 1980 y 2015, aunque algunos casos se remontan a la década de 1920.
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