Australia del Sur ha seguido a Queensland en la decisión de reabrir sus fronteras a los habitantes de Nueva Gales del Sur.
El cambio entra en vigor el domingo 31 de enero con una reapertura parcial de las fronteras de Australia del Sur para los residentes del Gran Sídney.
La frontera de Queensland se reabrirá a todos los habitantes de Nueva Gales del Sur a partir del lunes.
Gladys Berejiklian se congratuló de la reapertura total de la frontera con Queensland mientras Nueva Gales del Sur registra su undécimo día consecutivo sin un caso de COVID-19 adquirido localmente.
"Fantástico, una buena noticia", dijo Berejiklian cuando se le informó de la noticia en la radio 2GB.
"Espero que esto traiga mucha alegría y alivio a la gente, y que la gente se reúna", dijo también la Premier.
En Nueva Gales del Sur no se registraron nuevos casos de COVID-19 hasta el día de ayer, y se registraron tres infecciones en viajeros que regresaron al país y que se encuentran en cuarentena en un hotel.
Berejiklian no quiso criticar a su homóloga de Queensland, Annastacia Palaszczuk, por haberse enterado de la noticia indirectamente, y dijo que lo importante era que "se lograra el resultado correcto".
Queensland cerró su frontera a 35 áreas de gobierno local de Sídney, Wollongong y las Montañas Azules el 20 de diciembre de 2020 por un brote de COVID-19.
Berejiklian señaló que Nueva Gales del Sur no había tenido focos de coronavirus durante "bastante tiempo" e "incluso cuando lo tengamos, no creo que todo el estado tenga que sufrir".
"Hay muchas herramientas que los Estados pueden utilizar para gestionar un brote", dijo la Premier de NSW.
"Solo se deberían cerrar las fronteras como última opción", dijo Berejiklian.
El viernes, el área metropolitana de Sídney reducirá las restricciones sobre el uso de mascarillas y el número de visitantes permitidos en las casas y en reuniones o actos al abierto.
En Australia del Sur, los cambios a partir del domingo implican que los viajeros de NSW no estarán obligados a permanecer en cuarentena, pero deberán someterse a una prueba de coronavirus los días 1, 5 y 12.
También deberán aislarse hasta que reciban un resultado negativo en la prueba del primer día.
El Comisario de la Policía de Australia del Sur, Grant Stevens, dijo que el cambio podría revisarse si surgían nuevos casos en Sídney durante los próximos dos días.
Pero dijo que confiaba en que se alcanzaría el umbral de Australia del Sur de 14 días sin transmisión comunitaria.
"Esta es la medida más razonable que podemos poner en marcha y que permite esa libertad de movimiento entre NSW y Australia del Sur", dijo Stevens.
Mientras tanto, la Premier de Queensland, Annastacia Palaszczuk dijo que las autoridades están preparadas para cerrar las fronteras de nuevo si es necesario, para contener así cualquier brote futuro de las nuevas variantes provenientes del extranjero de COVID-19.
"Tenemos que estar atentos en este momento, en cuanto a la variante británica del COVID. Estamos muy preocupados por ello", dijo la Premier.
"Creo que se va a ver una respuesta más colectiva por parte de los Premiers y de los jefes de gobierno para tratar de hacer las cosas bien. Como hemos visto, el programa de hotspots ha funcionado bastante bien", dijo Palaszczuk.
Palaszczuk dijo también que seguía elaborando una propuesta para trasladar la cuarentena de los hoteles de la ciudad a los campamentos regionales, y que se estaban estudiando dos opciones.
"Estos (campamentos) son de cuatro estrellas, no de dos, y están muy bien ventilados y hay mucho espacio para moverse y todo, y además tiene a todos tus trabajadores en el lugar, hay menos riesgo", dijo la Premier.
"Nuestra cuarentena es nuestra última línea de defensa, y si esa cepa del Reino Unido sale ahora en nuestra comunidad, me preocupa mucho lo que eso supondrá para nuestra economía".
"Podría diezmar nuestra economía, no durante semanas, sino durante meses, así que creo que todos debemos estar en guardia", insistió la Premier de Queensland.
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