El informe anual del ACNUR sobre tendencias mundiales de los desplazamientos forzosos abarca a refugiados, solicitantes de asilo y personas desplazadas.
Según Naciones Unidas, el 2022 fue otro año récord para los refugiados y otras personas necesitadas de protección internacional, con 108 millones de personas desplazadas, lo que supone un aumento de 19,1 millones respecto al año anterior.
Es el mayor aumento interanual de la historia.
Filippo Grandi, alto comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados, afirma que esa cifra ha vuelto a crecer en 2023 debido al conflicto en Sudán.
Así es como nos encontramos hoy. Tenemos 110 millones de personas que han huido debido a conflictos, persecución, discriminación, violencia, a menudo mezclados con otros motivos, en particular el impacto del cambio climático. Así que tenemos el habitual, diría yo, paquete de causas que han provocado el nuevo aumento.Filippo Grandi, alto comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados, ACNUR.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, es Filippo Grandi, recuerda que hace dos años se anunció que por primera vez el mundo había superado los 100 millones de desplazados en el mundo. “Pues bien, ya se ha añadido un diez por ciento más a esta cifra”, afirma y agrega que esto constituye “toda una acusación contra el estado de nuestro planeta”.
Los conflictos fueron el mayor impulsor del desplazamiento, con la guerra en Ucrania, representando 5,7 millones de refugiados.
Foto de archivo de migrantes en un barco interceptado frente a la costa libia en 2018. Source: AAP
A nivel global, más de una de cada 74 personas está desplazada. 62,5 millones de personas fueron desplazadas internamente dentro de sus países de origen, es decir, el 58% del total.
Mientras que 35,3 millones fueron clasificados como refugiados, porque cruzaron una frontera internacional en busca de seguridad. Y 5,4 millones eran solicitantes de asilo.
Sorprendentemente, algo más de la mitad de todos los desplazados procedían de sólo tres países: Siria, Ucrania y Afganistán.
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Charlotta Lomas dice que se necesita la solidaridad internacional “para aliviar la presión sobre los países de acogida y crear las condiciones necesarias para que los refugiados puedan regresar a sus hogares o, al menos, en los nuevos países, encontrar la forma de prosperar".
Colombia entre los países de mayor acogida
Tres cuartas partes [76%] de todos los desplazados fueron acogidos en países de renta baja y media, la mayoría de ellos vecinos de sus países de origen.
Turquía, Irán y Colombia acogieron a las mayores poblaciones de desplazados.
Alemania fue el único país occidental entre los cinco primeros, sobre todo por el gran número de refugiados ucranianos.
Charlotta Lomas afirma que esto contradice el mito de que son las naciones ricas las que soportan la mayor carga.
Creo que lo que este informe pone de relieve es la absoluta necesidad de responsabilidad internacional. Necesitamos que todos los países, los países ricos, den un paso al frente y muestren solidaridad y proporcionen financiación y más lugares de reasentamiento para quienes buscan seguridad en todo el mundo.Charlotta Lomas, portavoz de la ACNUR.
Pero a medida que el problema mundial se agrava, muchos países occidentales están dando la espalda al problema de los refugiados.
Esto se debe a la intensificación del debate público y a los crecientes sentimientos antiinmigración, combinados con las presiones de la inmigración ilegal.
En lugar de adoptar soluciones humanitarias, los países están adoptando políticas punitivas para disuadir a los refugiados de llegar a sus costas.
Paul Power, Director Ejecutivo del Consejo de Refugiados de Australia, afirma que Australia ha sido un líder mundial en este ámbito.
Desafortunadamente Australia ha contribuido con su ejemplo a animar a otras naciones a oponerse a los movimientos de refugiados y a obligar a las personas que buscan protección a trasladarse a otros países. Y hemos visto cómo la política australiana de procesamiento en el extranjero en Naurú y Papúa Nueva Guinea ha sido copiada por el gobierno del Reino Unido con su acuerdo con Ruanda.Paul Power, Director Ejecutivo del Consejo de Refugiados de Australia
El número de refugiados en Australia también es bajo en comparación con los niveles internacionales. El año pasado llegaron a Australia 17.300 personas con diversos visados humanitarios. El 85% de ellas procedían de Afganistán, Irak, Siria y Myanmar.
La plataforma del Partido Laborista consiste en aumentar a 32.000 las plazas humanitarias que Australia recibe anualmente, pero no ha dado un calendario.
El gobierno debe anunciar las cifras del próximo año de forma inminente, antes de que comience el primero de julio.
Protesters show support for refugees in Australia (AAP) Source: AAP
“El gobierno australiano lleva años diciendo que no queremos que la gente venga a nuestro país a pedir asilo... si otros países del mundo adoptaran y aplicaran las políticas australianas, nadie que huyera de la persecución en su propio país tendría acceso a la seguridad", agrega Power.
SBS News se puso en contacto con la oficina del ministro de Inmigración, Andrew Giles, para pedirle un comentario, pero le remitieron a una declaración de abril tras su reunión con Filippo Grandi, de la ONU, la primera en una década.
En ella, afirma que el gobierno se ha comprometido a ser un líder mundial en la búsqueda de soluciones para los refugiados y desplazados, y a construir un marco mundial más sólido de protección y reasentamiento.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, Filippo Grandi, se ha mostrado muy crítico con los países ricos, entre otras cosas por su falta de atención a la guerra en Sudán en comparación con Ucrania, sobre todo una vez evacuados los ciudadanos occidentales.
Dice que “el liderazgo consiste en convencer a la opinión pública de que hay personas que merecen protección internacional y, por tanto, hay que hacer todo lo posible”.
También la U-N se enfrenta a un descenso de la financiación, en un momento en que su labor nunca ha sido mayor.
El año pasado, la U-N-H-C-R respondió a 35 situaciones de emergencia, tres o cuatro veces más que en años anteriores.
Filippo Grandi afirma que la situación exige una respuesta mundial coordinada y recuerda que “conceder el derecho de asilo a las personas que lo solicitan es una obligación legal, según el derecho internacional.”
La ACNUR presentará el informe en Ginebra, en el segundo foro mundial sobre refugiados, a finales de este año.
Para escuchar el audio con el informe completo, presiona la flecha en el botón de reproducción que aparece al inicio de esta página.
