Las cifras del informe anual del ONUSIDA también revelan que las personas que viven con el VIH/SIDA tienen más probabilidades de vivir en condiciones que dificultan el distanciamiento físico, lo que aumenta el riesgo de morir a causa de COVID-19.
Desde 2010, las nuevas infecciones por VIH se han reducido en todo el mundo en un 23%, pero las tasas han aumentado en un 72% en Europa oriental y Asia central, en un 22% en el Oriente Medio y África septentrional, y en un 21% en América Latina.
La doctora Natali Smud es del Servicio Multicultural de VIH y Hepatitis (MHAHS) y trabaja con comunidades cultural y lingüísticamente diversas en Nueva Gales del Sur. Ella nos habla sobre cómo se ha vivido este año la epidemia de VIH en Australia en medio de COVID – 19.
