Los traspiés en el despliegue del programa de vacunación infantil en Australia años preocupan a muchos médicos y padres que temen no lograr vacunar a sus hijos antes del inminente inicio del año escolar.
A partir de este lunes, los niños de entre 5 y 11 años en Australia podrán recibir su primera dosis de la vacuna Pfizer contra el COVID-19.
Sin embargo, un número significativo de personas dice haber experimentado dificultades para encontrar citas, a pesar de que el gobierno insiste en que no hay escasez de vacunas.
Puntos destacados:
- El despliegue del programa de vacunación a niños se inicia a pocas semanas del inicio del año escolar, por lo que muchos padres han expresado preocupación sobre el retorno a las aulas de sus hijos, sin estar vacunados.
- Mientras Queensland ha decidió retrasar el regreso a las aulas, Nueva Gales de Sur planea seguir con el cronograma establecido, a pesar del riesgo.
- El comandante del grupo de trabajo para la COVID-19, el Teniente General John Frewen, afirma que el desafío es la distribución, no las dosis de vacuna, añadiendo que, con sistemas de distribución tan complejos, a veces es difícil predecir dónde puede estar el embudo.
El comandante del grupo de trabajo del gobierno para enfrentar a la COVID-19, el Teniente General John Frewen, ha asegurado que tan pronto se resuelvan los problemas de distribución que está entorpeciendo la repartición de dosis, habrá suficientes suministros para vacunar a todos los niños en el grupo etario.
Frewen también informó que la mayoría de los más de 10.000 centros de vacunación estatales se están uniendo al despliegue de la vacunación infantil, y ha alentado a los padres a seguir intentando concertar citas en esos centros de vacunación estatales, mientras las clínicas médicas no puedan satisfacer la alta demanda.
Regreso a clases
Debido a los retrasos en la vacunación infantil, Queensland anunció que los estudiantes regresarán a las aulas el 7 de febrero en lugar del 24 de enero, dos semanas más tarde de lo previsto. Sin embargo, en Nueva Gales del Sur, se tiene previsto que los escolares inicien el año escolar el 31 de enero, de acuerdo con el cronograma establecido.
Si bien un poco más del 78 por ciento de los niños entre 12 y 15 años en Nueva Gales del Sur han recibido la pauta completa de vacunación, el cronograma actual de inicio a clases implica que muy pocos niños en edad escolar primaria, aquellos entre cinco y 11 años, contarán con las dos dosis de la vacuna antes de que las aulas abran sus puertas, en medio de una de las olas de contagio más sería que ha atravesado el país. El intervalo recomendado entre la primera y segunda dosis de vacunas en niños de ese grupo etario es de tres a ocho semanas.
La Dra Magaly Barrera, médico de cabecera de origen chileno en Sídney, dijo a SBS Spanish que si bien comprende que un retraso en el inicio del cronograma escolar representa un inconveniente más que puede ocasionar problemas en la dinámica de muchas familias, considera que el gobierno de Nueva Gales del Sur debe seguir las precauciones adoptadas por Queensland.
“Yo entiendo que el premier de Nueva Gales del Sur quiera que los niños vuelvan a clase por mantener una cierta normalidad y para que los padres puedan volver a trabajar sin mayores problemas. Pero, desde mi punto de vista, creo que sería mejor esperar a que estén vacunados,” dijo la Dra Barrera, quien considera que ese tipo de decisiones se están tomando por presiones políticas y no siguiendo las mejores prácticas de salud pública.
“Me parece excelente la política del gobierno de Queensland de atrasar el inicio de clases unas semanas, porque igual pueden recuperar dos o tres días en las vacaciones de invierno o más días antes de salir de vacaciones nuevamente a fines de año”, añadió.
No obstante, la Dra Barrera también tranquiliza a los padres, recordándoles que la severidad y transmisibilidad de la enfermedad en los niños suele ser menor.
“Los niños corren mayor riesgo infectándose de adultos a niños, que entre niños. No se sabe muy bien el por qué, pero es lo que se ha observado”, explica la médica de cabecera.
More than 1.5 million Australians come from non-English speaking backgrounds, but instructions for RATs are overwhelmingly in English. Source: Getty
Problemas en las cadenas de distribución
El número actual de contagios en Australia, estimados en casi 500 mil, de acuerdo a , ha generado bajas importantes en sectores esenciales para el funcionamiento del país, lo que a su vez ha irrumpido el buen funcionamiento de las cadenas de suministro.
El ausentismo se debe a que muchos trabajadores han dado positivo con el virus, o porque son contactos cercanos.
Las bajas no sólo han golpeado duramente al sector sanitario y causado disrupciones en la distribución de las vacunas, sino también ha impactado la repartición de alimentos a supermercados. Durante el fin de semana, los australianos compartieron en redes sociales fotos y videos de estanterías vacías en varios supermercados del país.
En respuesta, el primer ministro Scott Morrison ha anunciado un nuevo conjunto de pautas nacionales que acortarán el tiempo de aislamiento de trabajadores esenciales en algunas industrias vitales que hayan estado expuestos al virus, bien sea porque son casos positivos o contactos cercanos. En ese sentido, el gobierno ha manifestado que éstos podrán salir de su aislamiento antes, si están completamente vacunados y no tienen ningún síntoma de COVID-19.
Sin embargo, el Sindicato de Trabajadores del Transporte (TWU) ha respondido diciendo que la decisión de NSW Health de reducir los requisitos de autoaislamiento significa que los empleadores podrán priorizar los asuntos operativos sobre la seguridad de los trabajadores.
En ese sentido la Dra. Magaly Barrera ha dicho que le preocupa el cambio en el periodo de aislamiento, ya que personas asintomáticas podrían ser portadoras del virus y contagiar a otros sectores de la población más vulnerables.
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Datos importantes sobre el COVID-19 en Australia para el 10 enero
- Nueva Gales del Sur ha registrado 20.293 nuevos casos a través de pruebas PCR y un récord de 18 muertes. NSW aún no ha comenzado a publicar datos de pruebas rápidas de antígenos. Hay al menos 2.030 personas hospitalizadas con el virus, frente a las 1.927 registradas el domingo. Entre ellas hay 159 personas en cuidados intensivos.
- El premier de Nueva Gales del Sur, Dominic Perrottet, ha anunciado la adquisición de 50 millones de kits de prueba rápida de antígenos adicionales, lo que eleva el total del estado a 100 millones. En ese sentido, el gobierno de NSW dijo que a finales de esta semana permitiría que los resultados de la prueba rápida de antígenos (RAT) se registraran a través de la aplicación Service NSW.
- Victoria ha registrado 34.808 nuevos casos y dos muertes más. El número de personas hospitalizadas con COVID-19 en ese estado aumentó de 752 a 818 durante la noche.
- Queensland ha registrado al menos 9.581 nuevos casos de COVID-19, y las autoridades ahora cuentan las pruebas PCR y los resultados positivos de la prueba rápida de antígeno (RAT) presentados por los residentes. Ahora hay 419 personas hospitalizadas e el estado, 21 de ellas en cuidados intensivos y siete de ellas están intubadas a un ventilador.
- El Territorio Capital Australiano (ACT, siglas en inglés) registró 938 nuevos casos, mientras que Tasmania sumó 1,218 casos más.
- El ministro de Salud de Victoria, Martin Foley, anunció que una tercera dosis de vacuna de refuerzo será obligatoria para los trabajadores de algunas industrias específicas.
